En cada producción audiovisual siempre podremos encontrar un gran número de personas que trabajaron detrás de cámaras para lograr sacar el proyecto adelante; desde productores hasta los sound mixers; todos forman parte de la maquinaria que es hacer una película, videojuego, serie, etc.
En este caso hablaremos a grandes rasgos de los departamentos en los que se puede dividir un estudio de diseño:
Empecemos por el Production Designer, quien se encarga de gestionar al departamento de diseño y coordinar al equipo de arte, así como de entregar la carpeta de producción, la cual conglomera la información de las etapas de la misma: desarrollo visual, producción y marketing.
Después pasamos a las especialidades dentro del mismo departamento, las cuales podemos dividir en 3:
Se encarga del desarrollo de personajes, esto desde el perfil psicológico hasta el aspecto visual del mismo (fisonomía, forma de vestir, comportamiento, etc.)
Departamento especializado en, como su nombre lo dice, el desarrollo del entorno en el que se desarrollará la historia; desde su arquitectura, zona geográfica, entre muchos otros aspectos.
Este incluye armas, vehículos y cualquier aditamento extra que acompañe a algún personaje o que complemente algún ambiente.
Estos departamentos están conformados ya sea por una o varias personas dependiendo del tamaño de la producción.
En el segundo caso uno de estos departamentos está integrado por 3 profesionales: Lead Designer, Senior Designer y Junior Designer.
El Lead se encarga de dirigir al resto del equipo; gestionar el trabajo, tomar decisiones sobre el aspecto visual, y darle una coherencia visual a todas las piezas, esto consultado con los otros departamentos y con el Production Designer.
En el caso de los Senior designer, como su nombre lo dice, tienen más experiencia tanto técnica como en la toma de decisiones al momento de diseñar y los Junior son quienes están menos experimentados en la industria.
Es importante conocer las partes que conforman un departamento de diseño si aspiramos a formar parte de uno ya que nos dará más herramientas para decidir en cuál área enfocarnos, qué habilidades pulir o desarrollar y desde luego saber en qué especializarnos para dar un mayor valor a nuestras propuestas.